Fotografías de Jordi Pol, Arxiu Fotogràfic de Barcelona

Es indiferente cuándo se haya nacido. Si hay una idea ampliamente extendida en el imaginario colectivo barcelonés, ésta es que los Juegos Olímpicos del 92 supusieron un antes y un después para la ciudad. Al margen de juicios, comparaciones y otras ideas al respecto, que dejaremos para otro momento, las imágenes que se conservan de la Barcelona preolímpica son una muestra ineludible del cambio.

Jordi Pol, fotógrafo dedicado a la publicidad que no renunció a capturar la cotidianeidad de su entorno, es uno de los máximos exponentes a la hora de plasmar en imágenes la esencia ya pretérita de la ciudad. En las calles de la capital catalana aprendió a hacer fotografías, y de forma autodidacta adquirió un estilo propio que identificaba con una mirada inteligente y atenta todos los matices de unas calles auténticas, caóticas, con mucha energía vital.

Hasta el 14 de mayo de 2023, el Archivo Fotográfico de Barcelona acoge la exposición «Jordi Pol. Entre la multitud», en la que se pueden descubrir 120 imágenes del fotógrafo, escogidas entre su fondo, que él mismo cedió al Archivo en 2019, un fondo formado por 30.000 negativos y otros elementos fotográficos realizados por él. En este dossier encontraréis una breve selección de su obra, muestra de la Barcelona en blanco y negro que Pol conoció, entendió e inmortalizó.

Aún sin Juegos Olímpicos, en el declive de la dictadura o en plena Transición, encontramos la Rambla llena de bares, restaurantes y cafés cuyo origen era anterior a la Guerra Civil. También protagonizan estas imágenes los pájaros, como reclamo lúdico o comercial, o la transformación de un litoral prematuramente castigado por la contaminación, muestras de un paisaje urbano que ahora nos resulta tremendamente ajeno. Mención especial merecen las corbatas y los gestos impacientes en la Bolsa de Barcelona. O por si todavía dudáis de las diferencias entre aquella ciudad y la actual, haced un zoom (o acercaos a la revista) y fijaos en las portadas de las revistas y libros del quiosco.

En tiempos de campaña política permanente, nos preguntamos continuamente cuál será la Barcelona del futuro. Jordi Pol nos muestra la del pasado, sin filtros, sesgos ni florituras. Con luces y sombras. En blanco y negro.